―Papá, ¿es bueno o malo estar enfermo? No enfermo por ser viejito o por tener fiebre por el dengue, sino enfermo como tú. Además, en la escuela hay niños que no creen en Papá Diosito y me dicen que si existe, no es bueno de verdad porque deja que tú andes en una silla de ruedas.
―Hijo, me parece que nadie tiene esas respuestas. ¿Crees que no me gustaría ir contigo a la playa y cargarte sobre mis hombros para que te lances de cabeza al agua? Preguntar es bueno para cuestiones funcionales como arreglar un ventilador o poner en orden el cerebro de mamá, pero no para lo que nos estremece y nos pone la vida entre comillas. ¿Crees que sentir dolor sea bueno? Claro que no, pero el dolor nos indica que algo anda mal y debemos atenderlo. Sin embargo, es muy probable que cuando hurguemos en el dolor físico, topemos con un dolor más sutil y enmascarado.